Protección contra sobretensiones y rayos en hogares
De acuerdo con un estudio reciente, los daños eléctricos en los hogares han ido en aumento durante los últimos años, lo que ha generado un nuevo rubro de gastos. Los equipos eléctricos y electrónicos que se encuentran conectados a la red eléctrica, y en algunos casos intercambian datos y señales a través de líneas de comunicación, son altamente sensibles a las perturbaciones eléctricas. Estas redes de interconexión proporcionan una vía de propagación para las sobretensiones transitorias.
Más del 95% de los aparatos eléctricos y electrónicos que se utilizan en los hogares se componen de una electrónica sensible. Sin una protección adecuada, las subidas de tensión pueden destruirlos o acortar significativamente su vida útil. La instalación de un protector contra sobretensiones puede prevenir esta situación y alargar la vida útil de los equipos en más de un 20%, lo que reduciría significativamente la cantidad de residuos electrónicos. Además, esto reduciría el consumo eléctrico de las instalaciones, lo que se traduciría en ahorro económico y sostenibilidad medioambiental.
Además, la protección contra el rayo y las sobretensiones es fundamental para prevenir una serie de situaciones indeseables, tales como:
– Daños a las personas.
– Desgaste prematuro y/o destrucción de equipos, e incluso incendios.
– Interrupciones del servicio eléctrico.
– Pérdidas económicas por la interrupción de actividades.
– Pérdida de datos valiosos.
En definitiva, contar con una adecuada protección contra el rayo y las sobretensiones es indispensable para evitar los daños que pueden producirse en los hogares.
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